Presenta un diagnóstico sobre el estado de la calidad educativa y sus prioridades (logro académico, formación de ciudadanía, deserción adolescente y formación docente) en América Latina y el Caribe a inicios del siglo XXI. También muestra las políticas públicas que pueden modificar dicha realidad.
Muchos de los malestares de docentes y estudiantes, de los desajustes entre expectativas y experiencias y de los conflictos se originan en la brecha generacional. Las presentaciones se enfocan en propiciar una mayor interacción entre el docente y el alumno, en la cual se profundice la reciprocidad.