La ponencia presenta un caso de buenas prácticas para la formación de investigadores educativos, donde una comunidad académica está trabajando en generar conocimiento científico en dos líneas de investigación: impacto de la tecnología en los procesos educativos y el impacto social de la tecnología educativa. Los procesos de formación de investigadores se han dado a través de redes que trabajan en forma virtual cuestiones tales como: asesorías de tesis, investigadores trabajando con un proyecto afín e interrelación con otras redes académicas. En la ponencia se presentan resultados concretos sobre: la formación de recursos humanos, la generación de investigaciones, los desarrollos tecnológicos, la vinculación y la transferencia de conocimientos, entre otros. Este caso puede ser transferido a otros entornos educativos donde se busque innovar en la formación de investigadores educativos y optimizar los recursos humanos y materiales, apoyados con las tecnologías de información y comunicación